“EL HECHO DE QUE YO SEA CONYUGUE, HIJO, PADRE O AMIGO DE UN
ALCOHÓLICO, NO ME DA EL DERECHO A CONTROLARLO, AL TRATARLO
COMO NIÑOS MALCRIADOS O IRRESPONSABLES, LO UNICO QUE
CONSIGO ES EMPEORAR LA SITUACION”.
Un día a la vez en AL-ANON
Esta frase da a conocer que no hay que juzgar a la persona, ni darle la espalda cuando mas necesita de nosotros pues a veces esa persona es cuando más requiere ayuda; sin embargo, no podemos obligar, insultar o regañar a la persona para que deje el vicio ya que puede salir peor y su decisión debe ser de voluntad propia para que no se sienta presionado.
Pero tampoco por que mi padre sea alcohólico voy a faltarle el respeto ni insultarlo por tal como es, al contrario, debo ser buen hijo, apoyar al padre y superarnos cada día.
Lo que podemos hacer es apoyar a la persona haciéndola reflexionar de sus propios actos y orientarla a lo bueno, pero lo que no debemos es involucrarnos más a fondo pues ya para la decisión final la va a tomar la persona de los propios zapatos, y tendrá que asumir sus responsabilidades.
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